Domingo, 25 de octubre de 2015.
Siete menos cuarto de la mañana, y nosotros estrenando blog.
Uno más entre millones, por supuesto, con la misma voluntad que el resto: publicar y ser leído.
Nada nuevo bajo el sol... pero es nuestro sol. Y quema.
Todo blog responde a una necesidad íntima de compartir con los demás. Nosotros no somos distintos en eso. A lo largo de los próximos meses, quién sabe si años, quedará bien claro lo que queremos compartir. Si logramos mantener a raya a esos monstruos blogueros que son la prolijidad y el egocentrismo, de los que tampoco nosotros estamos a salvo, creemos que este espacio se puede convertir en un punto de encuentro de amigos íntimos y paseantes ocasionales, unidos todos por la afición a las letras, a la buena literatura y a las historias que merecen ser leídas.
Para nosotros, compartir es algo tan espontáneo como apasionado; una muestra de amistad caótica e intempestiva. Por eso, nos negamos a ofrecer un calendario fijo de publicaciones, ni siquiera un ritmo temático, sino que nos proponemos colgar, sin orden ni concierto, tantas reseñas literarias como artículos de opinión, relatos, entrevistas, cuentos, apuntes, poemas, aforismos y gamberradas salgan de nuestra mollera.
Sin premeditación, por supuesto,
pero con grandes dosis de alevosía.
Todo blog responde a una necesidad íntima de compartir con los demás. Nosotros no somos distintos en eso. A lo largo de los próximos meses, quién sabe si años, quedará bien claro lo que queremos compartir. Si logramos mantener a raya a esos monstruos blogueros que son la prolijidad y el egocentrismo, de los que tampoco nosotros estamos a salvo, creemos que este espacio se puede convertir en un punto de encuentro de amigos íntimos y paseantes ocasionales, unidos todos por la afición a las letras, a la buena literatura y a las historias que merecen ser leídas.
Para nosotros, compartir es algo tan espontáneo como apasionado; una muestra de amistad caótica e intempestiva. Por eso, nos negamos a ofrecer un calendario fijo de publicaciones, ni siquiera un ritmo temático, sino que nos proponemos colgar, sin orden ni concierto, tantas reseñas literarias como artículos de opinión, relatos, entrevistas, cuentos, apuntes, poemas, aforismos y gamberradas salgan de nuestra mollera.
Sin premeditación, por supuesto,
pero con grandes dosis de alevosía.
Esperamos que os interese, de todo corazón.
Creemos que va a merecer la pena.
Salud.
David Rubio e Ignacio Sánchez
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